El amor y otras cosas

Muchos tenemos miedo a ser quienes pasemos por una enfermedad, o de perder un ser amado o de no encontrar el amor en quien nosotros esperamos, pero realmente. ¿Tiene sentido que nos afanemos con esto?   O ¿solo estamos exagerando un poco?, conversando con un amigo él me cuenta que vio a un pequeño gatito intentando pasar una calle muy transitada, y puede ser que haya estado muerto del miedo pero él sabía que tenía que pasar por ahí para llegar a su destino, después de algunos minutos este animalito se encontraba ya del otro lado de esa calle y se entero que era capaz pero, porque lo intento y no se acobardo; esos somos nosotros viviendo cada uno nuestros problemas, enfermedades, responsabilidades, el nombre que le quieran poner, al principio nos creemos muy “débiles” o “incapaces” de lograr lo que tanto soñamos y simplemente nos quedamos de espectadores de cómo otros cumplen sus objetivos cuando claramente podemos también ser nosotros, no pasando encima de las cabezas de nadie pero si

Y así de fácil en un respiro se nos puede ir la vida, pretendiendo diversión y queriendo “ser libres” pero no sabemos cuando esa libertad que hemos creado como un espejismo nos impedirá regresar a casa, hará que nuestros padres lloren, que nuestros amigos nos extrañen, que se note grandemente nuestra ausencia en cada una de los lugares a los que solíamos ir, pero realmente es   el transcurso de la vida, una vida en la que para aprender necesitamos derramar lagrimas y una que otra vez intentar darnos por vencidos porque solo de esta manera aprenderemos a valorarla como lo que es: un tesoro, si un tesoro que tenemos que cuidar y cultivar como a una pequeña semilla abonándola con amor hasta que vaya creciendo una bella flor que sea capaz de dejar a quienes nos rodean sin palabras a causa de tanta belleza, porque además de ser una hermosa flor es fuerte y sus raíces están seguras   y no hay tormenta alguna ni mucho menos viento que la pueda derribar , apoyada por las demás flores que se en